Una añada especial
Durante el invierno las lluvias fueron las habituales y ya en la primavera las buenas temperaturas aceleraron el desarrollo vegetativo que posteriormente se vio frenado con la llegada del verano. Las altas temperaturas y la escasez de lluvia del periodo estival se extendieron hasta pasada la vendimia. Estas circunstancias proporcionaron una concentración y una madurez de uva sobresaliente. Es por lo tanto, un año de vinos con una marcada personalidad, rotundos, de gran densidad aromática y peso en boca.
Viticultura ecológica y sostenible
Elaborado a partir de uva ecológica prescindiendo del uso de sulfuroso, fermentado a temperatura controlada, macerado durante 15 días con sus hollejos.
Un sinfín de matices
Color violáceo, muy cubierto y llamativo. En nariz es intenso, con mucha personalidad, donde se aprecia una marcada presencia de
frutas frescas, rojas y negras. En el conjunto destaca un característico aroma floral a violetas y notas cítricas y de regaliz, lo que hace de la expresión aromática de este vino algo sumamente singular y sorprendente. En la boca es voluminoso y estructurado, de acidez equilibrada y postgusto fresco y persistente.