- La vendimia de 2024 en Bodegas Emilio Moro ha sido una cosecha de gran calidad en ambas regiones, destacándose por las condiciones climáticas favorables y el compromiso con la excelencia
- Tanto la Ribera del Duero como El Bierzo continúan consolidándose como referentes en el mundo del vino, ofreciendo vinos de carácter y autenticidad
La vendimia es, sin duda, el momento cumbre en el calendario vitivinícola, una celebración de la naturaleza y el esfuerzo humano. Esta temporada, Bodegas Emilio Moro ha vivido una campaña inolvidable en sus viñedos de la Ribera del Duero y El Bierzo, dos joyas del panorama vitivinícola del país. Las condiciones climáticas favorables y el compromiso incansable del equipo han resultado en una cosecha de calidad sobresaliente que promete vinos memorables, cargados de autenticidad y carácter.
Ribera del Duero, con su tradición centenaria, y El Bierzo, con su autenticidad en cada botella, destacan en este 2024 como dos grandes exponentes de la riqueza vitivinícola española. Para Bodegas Emilio Moro estas dos regiones han sido un ejemplo del perfecto equilibrio entre la tradición y la innovación, donde se ha unido el respeto por las prácticas ancestrales con la incorporación de tecnologías y métodos que mejoran la calidad de cada cosecha.
Ribera del Duero: Excelencia y tradición que perduran en el tiempo
Este año, la vendimia en Ribera del Duero ha estado marcada por unas condiciones climáticas que han favorecido el desarrollo de una uva sana y equilibrada. La bodega vallisoletana ha vivido un ciclo vegetativo controlado, con temperaturas suaves y lluvias bien distribuidas, lo que ha permitido una maduración perfecta de la uva Tempranillo, la variedad insignia de la región.
El equipo de Bodegas Emilio Moro de la Ribera del Duero está entusiasmado con la cosecha de este año, que ofrece un fruto con un equilibrio excepcional entre acidez y azúcar, augurando vinos de estructura firme, con una gran capacidad de guarda y una elegante expresión del terroir. Cada vendimia representa una nueva oportunidad para seguir haciendo historia y la de 2024 se vislumbra como una de las más memorables, con vinos que destacarán por su carácter y profundidad.
Álvaro Maestro, director técnico de Bodegas Emilio Moro, se muestra optimista: «Este año hemos conseguido una uva que refleja a la perfección nuestra tierra. La combinación de un verano moderado y un final de ciclo suave ha resultado en una uva con una concentración y frescura excepcionales. Estamos seguros de que los vinos de esta añada serán recordados por su personalidad y elegancia.»
El Bierzo: Una tierra que seduce al mundo del vino
El Bierzo sigue consolidándose como un referente ineludible en la escena vinícola mundial, y la vendimia de 2024 ha sido una clara muestra de ello. Este 2024, Este año marca el debut del primer vino tinto de Bodegas Emilio Moro en la región, Bestizo, elaborado con la variedad Mencía. Esta variedad ha mostrado una maduración homogénea con racimos perfectamente formados y una sanidad extraordinaria. Las condiciones climáticas, aunque cálidas durante el verano, han permitido obtener una uva fresca, con una acidez vibrante y una concentración de aromas que prometen vinos complejos y llenos de matices.
Por otro lado, la variedad de Godello, con la que la bodega lleva trabajando más de 10 años elaborando sus vinos blancos –Polvorete, El Zarzal y La Revelía– también ha brillado en esta temporada con uvas que han alcanzado un punto óptimo de maduración, asegurando vinos minerales, frescos y con una gran capacidad de envejecimiento. “La Mencía ha demostrado una vez más su capacidad para adaptarse a las condiciones de nuestra región, y estamos emocionados por los vinos que saldrán de esta cosecha. Los blancos, en particular, serán verdaderas joyas con una acidez equilibrada y aromas complejos», afirma Álvaro Maestro.
Climatología y esfuerzo: Las claves de una vendimia memorable
La climatología de 2024 ha sido uno de los factores clave en el éxito de esta vendimia. Tanto en Ribera del Duero como en El Bierzo, el año ha estado marcado por un verano caluroso, pero sin extremos, seguido de lluvias oportunas al final de la temporada que ha permitido una maduración equilibrada de la uva. Además, las viñas han contado con suficiente sustento hídrico, lo que ha ayudado a preservar la frescura y el carácter de las uvas evitando así el estrés hídrico.
En ambas regiones, la vendimia es un proceso que va más allá de la recolección de la uva. Es un momento de conexión con la naturaleza, de adrenalina y esfuerzo conjunto, donde se trabaja codo con codo para conseguir la mejor materia prima posible. «Vendimiar es, para nosotros, el momento más importante del año. Es el resultado de todo el trabajo y cuidado que hemos dedicado a nuestras viñas durante meses», señala Maestro, director técnico y enólogo de Bodegas Emilio Moro.
La vendimia de 2024 en la Ribera del Duero y El Bierzo no solo consolida la calidad de ambas regiones, sino que también marca un nuevo capítulo en su historia. Ambas denominaciones continúan apostando por el respeto a la tradición y la búsqueda constante de la excelencia, ofreciendo vinos que destacan por su autenticidad y por ser reflejo de los terruños únicos que representan.
Este año será recordado como un ejemplo de superación y trabajo en equipo, y los vinos que nazcan de esta cosecha en Bodegas Emilio Moro serán una prueba más de que la Ribera del Duero y El Bierzo son dos de las joyas más preciadas del panorama vitivinícola español.